mercredi 25 août 2010

Calendarios llenos de polvo.





A ella (que no ello, ahora no hay nada, no queda nada) le daban miedo tantas felicidades subyacentes. Tantos buenos momentos que estaba viviendo. Tanto positivismo en el ambiente. No era normal (y sí lo era). Ya era hora, pensaba una y otra vez. Quizá sea la respuesta a aquellos meses trágicos. Cuando sucedió todo. Aquel desenlace digno de película de Médem. Que nos dejó con la boca abierta. A todos. Que nos hizo quedarnos en el asiento comprobaCursivando si realmente había pasado o si estábamos viviendo una pesadilla soñando despiertos. Que nos hizo dejar el calendario postrado en Mayo por si todo era mentira, para no ver pasar el tiempo. Y el calendario sigue ahí, parado, de verdad. Sigue en Mayo esperando a que alguien arranque sus hojas y devuelva su vida, la de ella, al mundo real otra vez. A vivir de nuevo. A enamorarse otra vez. O a requeteenamorarse de aquello de lo que se tuvo que desenamorar a marchas forzadas. Sigue esperando el tirón definitivo. La valentía que nos falta. Por el miedo que nos sobra. Quizá sea el momento de arrancar sus hojas por fin, pensó ella. ¿O mejor dejarlo así?. Quizá sea un presentimiento humano y fantástico, una respuesta a la pregunta que no tuvo respuesta antes. La respuesta a que todo sería igual, aunque arrancara miles de meses. Quizá debería comprobarlo. Siempre podría pegarlas de nuevo. Como si nada. Pero aún así, distrayéndose pensando en si arrancarlas o no, seguía envadiéndola aquella alegría aplastante que se sucedía durante los últimos días. Inspiración a raudales destilando por cada por poro de aquella piel pálida. Ganas de no hacer nada, de hacerlo todo. De que nada es imposible, si te lo propones. Si vuelves a ser valiente, como aquella vez. Como aquella maldita vez. ¡Ánimo!. Las hojas del calendario te esperan.
(Esta es una historia totalmente verdadera.)




Sigo buscando tiendas vintage en Madrid :)
Sí, tengo una ligera obsesión con fotos a los pies.

5 commentaires:

  1. Madem me mata. El mes pasado me decidí a ver su pelíccula, así que la compre en el videoclub, y, en compañia de mi madre, flipamos.
    Besitos:)

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  2. Yo también busco tiendas vintage por Madrid! Si sabes alguna no dudes en decirmelo por dios! jajaja
    un besazo, por cierto te sigo!

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  3. Creo que me acabo de enamorar de un puñado de palabras, muchacha.

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  4. Que genial el post chica :D
    Un besote

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  5. medem es genial... todavía tengo pendiente de ver room in rome.

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A veces hay cosas que es mejor contarlas.
Sólo por si acaso.