samedi 4 septembre 2010

Fotos de fotos emborronadas de recuerdos.







Ella dejó la foto colgando en la cuerda. Sujeta por una pinza. De madera. Para que no tuviera contacto con la realidad. Ya era demasiado. Papel impreso en realidades en color. O en blanco y negro. Más antiguo. Más humano. Los segundos pasaban. La foto goteaba. Clap, clap. Las gotas caían al fondo de la bañera. Se perdían por el desague. Huían. Adiós. La foto se revelaba poco a poco. Iban apareciendo sombras que se cargaban de nitidez con el paso de las manecillas del reloj. Se iban descubriendo personas. Paisajes. Días. Situaciones. Sensaciones. Recuerdos olvidados en la memoria pero que permanecían allí. A la espera de ser descubiertos. De aparecer de entre las sombras. Clap, clap. Se podían intuir caras. Se podían intuir personajes más o menos importantes en aquella historia. Aquel. Aquella. Ese. Eso. Esa. Éste. Ésta. ÉL. Él ocupaba la mayor parte de las fotografías ya reveladas. Fondos poco nítidos detrás, pero fondos al fin y al cabo. Descubriendo que existía de verdad. Que no había imaginación posible. La memoria de ella se movía al mismo tiempo que la rapidez de los tintes rojos para dar lugar a la imagen. A su memoria llegaban recuerdos ya lejanos que aparecían allí mismo, en la foto. Las fotos nos contaban de una manera entrometida demasiados detalles, demasiados sentimientos que se escapaban por el desague.Nos hablaban de paraísos perdidos, de corazones que ahora se juntaban con imperdibles para no romperse del todo, de noches vacías, de noches de insomnio, de tardes oscuras, de talleres, de trenzas, de niñas, de niños, de todo, de mensajes enviados a las tantas, de perdidas no respondidas, de promesas llenas, de palabras vacías, de explicaciones sin sentido, de te quieros que se perdían en los kilómetros, de te echo de menos, de él, de ella, de juntos, de siempre. Clap, clap. La tinta caía sin cesar. Los recuerdos acechaban ahora todo el espacio. Se quedaban allí. Acechando. Recordándola que el tiempo transcurría ahora sin saber a qué atenerse, qué esperar de alguien, de quién, de él. El tiempo intimidaba. La foto se escurrió de la pinza. Los recuerdos cayeron. La tinta que reposaba en la bañera emborronó la foto. La cubrió de recuerdos. La volvió a impregnar de todo lo que parecía perdido. Ella recordó entonces lo demasiado bueno. Lo que había olvidado. Lo que había apartado para dejar paso al pesimismo. Para pensar que no había final feliz. Sí lo había. Estaba allí. Emborronando la foto. Convirtiendo los recuerdos malos con fotos llenas de odio en páginas rojas, sin ningún recuerdo doloroso que se pudiera apreciar. Las fotos caían sin parar. La bañera se llenó de ellas. La tinta roja las cubría. Las olvidaba. Las perdía. Los recuerdos malos se iban ahora por las tuberías. Y algunos buenos también. Los que hacían demasiado daño. (Ella solía creer que no eran los malos recuerdos los que más dolían, sino los buenos, puesto que estos te hacían pensar en las cosas que habías perdido por no pronunciar palabras a tiempo. Por no ser valiente). También cayeron pues fotografías buenas, bonitas, llenas de sonrisas. Llenas de abrazos en silencio y miradas de rubor rosado. Llenas de risas que se habían perdido. Quedaba la esperanza ahora. Y ella seguiría esperando. Sólo quedaban once fotos. Había revelado treinta y dos. Demasiados recuerdos en la alcantarilla. Demasiadas esperanzas puestas ahora en la puerta. En esperar al destino. A él.




















7 commentaires:

  1. q bonito tu texto, como intentas defender a las fotos colgadas en una cuerda para q no se contaminen de la realidad... (L)

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  2. Muchas sensaciones, muhcas situaciones describes en este texto. Y yo que me he quedado con lo de las perdidas no respondidas, fíjate. Que pueden ser lo más tonto, o en el contexto adecuado, pueden ser una crueldad. Como siempre, me encanta como escribes :)

    Besos

    http://the-thinking-cat.blogspot.com/

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  3. Como siempre, estupendo el texto, de verdad, que me alegras el día chica!
    xxx
    martina

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  4. Al igual que los demás posts, es precioso, me encanta como escribes.
    Un beso

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  5. Qué bonito el texto y qué bonito lo que se ve de la fiesta :)
    (L)

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  6. Nos encanta como escribes.. el texto es precioso!
    Te seguimos, pásate. LOV

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