lundi 3 janvier 2011
Cuento (I)
Esperabas algo del mundo mientras te sentabas en mis rodillas. Nunca supe el qué. ¿Querías alguna estrella favorita?. ¿Algún vinilo famoso?. No lo creo. A tí te iban más los cometas en tus pestañas y los pies en el radiocassette. Esperabas algo de mí. Yo lo sabía. Pero tampoco supe el qué. ¿Querías un beso?. ¿Un abrazo?. No lo creo. A tí te iban más lo chavales que te acompañaban a comprar helados después del colegio. Los que te sacaban un curso. Los que te pagaban tu polo de hielo favorito a expensas de poder tocarte un poco en el único banco del parque. Yo nunca te compré un helado. Tampoco te toqué. Sólo dejaba que te sentaras en mis rodillas.
Inscription à :
Publier les commentaires (Atom)
y sin embargo seguro que lo único que esperaba ella de tí era un te quiero, alto y sincero, sin miedo y con un futuro delante.
RépondreSupprimera veces una sólo espera eso, el silencio y los latidos de otra persona. muás
RépondreSupprimer